Camino de Galicia voy caminando,
bordón de peregrino llevo en mis manos.
Voy ligero de alforjas hacia Santiago...
de noche cuento estrellas, de dia canto.
Un lucero me guia, y un angel blanco
apunta mis jornadas en su diario.
Voy llenando mis ojos de verdes claros,
de azules horizontes
y rosas palidos...
¡Que vellas las mañanas y los ocasos!
¡Que profundo se duerme
tras el cansancio!
Cuando a Santiago llegue
mirará el Santo mis pies encallecidos
mi cuerpo flaco, mi bordón florecido
por un milagro.
F.M
martes, 26 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario