viernes, 6 de diciembre de 2013

LA INMACULADA
¡Diciembre la inmaculada!
aquella flor invernada
que del rosal no cayó
¡madre, que dicha es tenerte!
déjame, subir por verte,
al diciembre del amor.

Pues si el amor infinito
cuajó en el rosal humilde
que tú viste florecer,
acepta esta flor ahora,
no la rechaces, señora,
que si Dios nació en diciembre
no es mal tiempo de nacer.

Poeta anonimo