En la parroquia de mi barrio
me siento muy arropada,
siempre encuentro actividades
que me ayudan a formarme.
Nuestra parroquia es abierta
es familiar y dinámica
comprometida y jovial,
en ella se dan cita infinidad de culturas
donde nadie se siente extraño
pues todos somos hermanos.
La ermita con su patrona,
es la insignia de nuestro barrio,
tiene muchos seguidores que la adornan a diario,
y la mantienen abierta
para poder venerarla.
Somos un barrio sencillo
de gentes trabajadoras,
que recordando nuestras raíces
reforzamos nuestro empeño
para que nuestro "barrio dormitorio" dejara pronto de serlo;
Y con esfuerzo y tesón logramos tener un barrio
que nos llena de emoción.
miércoles, 9 de febrero de 2011
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2 comentarios:
Que poesía mas bonita has echo para el barrio. En ella reflejas el cariño que sientes por él y creo que todos@ los que vivimos aquí sentimos igual.
Gracias Celia por tu visita.
Besitos.
HOLA CELI;
La poesía es muy bonita,la parroquia y su gente también devén serlo,me parece una hermandad muy unida y, eso solo se consigue como has dicho con gente sencilla y sobre todo muy compenetrada.
Un abrazo.
Rosa.
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